
Hoy hice clase en un quinto básico (10 años aproximadamente). Y los niños me preguntaron acaso sabía que sucederá el 6 de junio de este año. Pensé en la fecha (06-06-06 o mejor 6.6.6.), y me dí cuenta de lo obvio de la pregunta.
En mi mente se instaló automáticamente el recuerdo de la película "La profecía", que ví siendo un pequeño casi como los que ahora tenía enfrente. Claro que me asustó imaginar que el Diablo tendría un hijo viviendo entre nosotros. La película provocó el efecto que pretendía.
Casi 20 años más tarde - seguía pensando a mil por hora- es increíble que este tema siga provocando curiosidad y controversia en tanta gente.
Es que jugar con temas que tienen que ver con aquellos que "no se ve", sino que se siente, como la fe, el miedo, la magia, el secreto, y más "atractivamente" el diablo, nos parezca bien o no, vende. Y vende porque siempre habrá gente con la predisposición a creese TODO lo que se le ponga por delante y que parezca misterioso, ya sea la cercanía de una fecha como la mencionada, o un libro sobre los secretos del Vaticano, o la posibilidad de la "personificación" del demonio..etc. Y vende porque siempre habrá gente interesada en llenarse los bolsillos con historias que - inteligentemente- mezclas la fantasía comercial del autor, con algunos aspectos de la realidad. No seamos ingenuos....
Bueno, al final, respondí a los pequeños que ese día no tenía ningún significado especialmente oculto o del cual temer, salvo para aquellas personas demasiado temerosas e ingenuas. "Aunque en realidad si sucederá algo relacionado con el demonio - les dije, provocando un silencio absoluto - ese día estrenan "La Profecía", un apelícula que vi cuando era chico y logró asustarme".